
09/ Martes
Antonio Martínez
Fiesta ediciones
Escuchen la historia que canta este pobre ciego. Contemplen la alfombra que se está tejiendo: ciervos, águilas, culebras, plantas, hombres, mujeres... Grecas con figuras que se repiten pero sin ser copias exactas como es lo habitual. Observen en la gran alfombra los cambios de tamaño, de color y de actitud de estos seres cada vez que reaparecen; se asemejan a las melodías variables de las sinfonías.
El telar tiene un madero horizontal que se llama don Espacio y otro vertical que se llama don Tiempo. La alfombra se está haciendo sola aunque los sujetos parecen tener voluntad tejedora.
Las figuras son la propia alfombra, seres y situaciones que observamos redundar en ciertos fragmentos y que, llegado el momento, no volverán a aparecer. Y la duda que nos queda es si seguirán determinando la urdimbre que viene tras ellos.
Ahora les pido, por favor, una limosna para este pobre ciego: arránquense los ojos y dénmelos a mí que me hacen más falta.
(Iván del Rey de la Torre)